La voz del Decano en el suplemento La Palabra
En la nota "Agro XXI/Modelo para armar" el Ing. Scatturice dialogó sobre cuál es el rol de la Universidad Nacional de La Plata en el sector agropecuario y cuáles son los modelos posibles que se debaten a futuro.
En 62/Modelo para armar, Julio Cortázar propone un modelo literario en el que es necesario que el lector sea una parte activa; que desteja imagen tras imagen, frase tras frase ("Pensar era inútil como desesperarse por recordar un sueño del que sólo se alcanzan las últimas hilachas al abrir los ojos"). También quienes se acerquen al texto se esforzarán por crear un hilo conductor del relato y podrán darle forma y figura a los personajes. Este modelo de novela no es un modelo más, sino uno que intenta crearse, fundirse con quien la piensa.
Definir el sector agropecuario, el campo, el agro, la pampa -algo aparentemente estático como el texto impreso-, , exige una reflexión similar y que, a criterio de quienes día a día lo hacen su objeto de estudio, necesita ser pensado en forma conjunta con sus actores actuales, pero también, y fundamentalmente, las generaciones por venir.
Subtítulo: Lo que está en juego
El Iingeniero Agrónomo Daniel Edgardo Scatturice es decano de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales y explica que una mirada sobre las actividades agropecuarias actuales implica pensar en términos de obtener y lograr la mayor sustentabilidad posible, para entenderla como un concepto fuerte: "adherir a ciertos principios que implican, por ejemplo, seguir la impronta del informe Brundtland: hacer un uso sustentable de los recursos que permitan a las futuras generaciones disponer de ellos, preservarlos y mejorarlos ".
Detalla que ante el escenario que se está desarrollando, no sólo en Argentina sino a nivel mundial, el objetivo pasa por formar profesionales comprometidos con el desarrollo sustentable en todas las ramas del conocimiento. "Y esto no va a pasar de un día para otro, hay que comenzar a profundizarlo, lo que implica cambiar la matriz formativa y también aportar saberes a nuevos modelos de producción. Para ello la Universidad tanto como centro de producción de conocimiento y de formación de profesionales, tiene mucho que decir desde el plano crítico, y también debe hacerlo con sus actividades de Extensión, que hoy tienden a ubicarse, afortunadamente, en el mismo nivel que las otras dos funciones".
El Ingeniero explica que los modelos actuales de producción comenzaron a gestarse en la década del 70, cuando empezaron a estar vigentes tecnologías más capital intensivo ligadas a innovaciones biológicas y químicas, y algunas con su consecuente innovación mecánica. "El cambio del paradigma productivo que se da a partir de la introducción de la soja como cultivo emblemático, como símbolo, generó un paquete tecnológico capital intensivo en insumos y una demanda externa al sistema productivo. Por otro lado, también existen mayores costos principalmente, en lo referente al impacto ambiental".
Por ese motivo, puntualiza la propuesta de desarrollo sustentable que implica una mirada diferente desde los sistemas de producción, lo que se intenta promover desde la Facultad tanto en Investigación, como en Formación y en Extensión. Para ello se necesitaría realizar una transición hacia sistemas de producción más sustentables. "Para esto ya hay ensayos al respecto, en campos de producción reales en donde el manejo agroecológico da muy buenos resultados tanto productivos como económicos".
En ese sentido, destaca, que deberíamos realizarnos una pregunta: si producimos más ¿para quién es el excedente que se produce? "En la agenda mundial, el hambre aparece como un tema prioritario en el que el sector agrícola debería estar absolutamente comprometido. Entonces, tendríamos que preguntarnos de qué manera nuestras producciones impactan y contribuyen a mejorar la alimentación. Por lo tanto, veremos que el pequeño y mediano productor, cercano a las ciudades, tendría acceso directo para proveernos alimentos, y aportar a la solución del problema de poblaciones en situación de emergencia alimentaria. Para ello hay que mirar a la pequeña producción sustentable, y por consiguiente, básicamente a la Agricultura Familiar".
Subtítulo: Los desafíos en formación y extensión
El Ingeniero Scatturice puntualiza que se intenta formar un agrónomo que reflexione sobre estas cuestiones a lo largo de su carrera, y que ese proceso de reflexión implique "pararse críticamente" frente a las tecnologías. "Como Universidad Pública tenemos la responsabilidad de pensar desde la formación de criterio público. Nosotros estamos en el centro de la cuestión, somos portadores de tecnología pero ¿de qué tecnología, para quién, y dónde la aplicamos?. Donde vayamos, vamos a encontrar, un entorno social, un territorio, donde el agro es su sustento, donde se practican y promueven sistemas de vida y de producción que deben preservan la biodiversidad y procesos sostenibles de transformación productiva, que nosotros como agrónomos debemos entender.”
Remarca que el saber científico establece que ciertas cosas funcionan bajo determinadas condiciones de experimentación, validadas a nivel nacional e internacional y se cree que son lo mejor para ese entorno. "Pero debemos saber y detenernos a observar si ese entorno familiar, ese territorio necesita lo que los agrónomos venimos a proponerle. Detenernos por un instante a reflexionar con los actores de ese proceso productivo, es una columna importantísima en la transferencia tecnológica. Porque uno va a transferir algo que se lo tiene que apropiar quien lo van a usar".
Sostiene que existe mucha capacidad en la Universidad para trabajar los temas ambientales, porque pueden ser abordados desde todas las Unidades Académicas. "Queremos que nuestros estudiantes sean conscientes de esto, porque si nos quedamos en el campo y somos un profesional con un productor, estamos viendo sólo una parte del todo. Creo que nuestra tarea, en la Universidad Pública es abrirnos sabiendo que no somos únicos, sino que también hay otros involucrados y nuestras acciones tienen impacto".
En este sentido destaca tres emprendimientos que está llevando adelante la Facultad en predios de la Universidad: el tambo en Santa Catalina, Lomas de Zamora; El Amanecer en Vieytes donde se desarrolla un sistema de producción de cría vacuna; y en Don Joaquín, en Bartolomé Bavio, comenzado hace poco tiempo, donde se está implementando un sistema agrícola ganadero sustentable. "Los tres campos representan un gran porcentaje de los sistemas de producción de la región pampeana, porque tienen agricultura, y ganadería en distintas formas (tambo, cría, recría, engorde entre otras). De alguna forma es una síntesis de lo que estamos proponiendo como transición a algo más sustentable. Que los productores locales utilicen tecnologías, prácticamente a costo cero, con los recursos naturales y tengan niveles de producción aceptables. La idea es trabajar el concepto de recurso renovable"
En esta propuesta aparecen los tres sentidos de la Universidad. "Se hace, docencia ya que varios cursos trabajan en el lugar. También hay grupos de docentes investigadores, que hacen investigación sobre estos sistemas, y además se hace Extensión, porque existe convocatoria a productores de la zona, se realizan visitas a los campos y se articulan las tres funciones de la Universidad. Lo importante es que todo se lleva a cabo sobre el sistema, que es diferente a hacerlo sobre una parcela experimental. Es un trabajo sobre el sistema real".
La idea, finaliza el Decano de Ciencias Agrarias y Forestales, es que otras unidades académicas puedan acercarse a la propuesta. "Ya hicimos alguna experiencia con docentes de Derecho, para hacer un observatorio jurídico en trabajo rural. Se acercan trabajadores y se les informa sobre cuestiones legales vinculadas a las normativas relacionadas al trabajo agrario. También se contactan con los productores, en relación a la Ley de Agricultura Familiar, entre otras.".
Subtítulo: Un ejemplo de proximidad
Dentro del marco de esta política y través de un convenio firmado con la Dirección General del Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores Agrarios (RENATEA), la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP ofrecerá atención primaria en salud visual y ayudas ópticas gratuitas a trabajadores agrarios de todo el país a través del Programa Salud Visual para Todos.
Por medio de esta iniciativa impulsada desde la Secretaría de Extensión de esa facultad, se brindará atención optométrica y se confeccionará anteojos y lentes de contacto en forma totalmente gratuita a todos los trabajadores del sector agrario y sus familias.
El objetivo principal es garantizar la corrección de problemas visuales, especialmente en niños en edad escolar y en trabajadores en actividad. En el caso de los niños, los problemas en la visión pueden generar dificultades en el aprendizaje y alteraciones en la conducta social; mientras que cuando se trata de trabajadores, la disminución de la visión puede derivar en incapacidad laboral.
Por este motivo, un equipo de licenciados en óptica ocular y optometría trabajará en distintas localidades del interior y sobre una población aproximada de 7 mil trabajadores agrarios.